Júpiter, el planeta
gaseoso más grande de nuestro Sistema Solar, tiene su propia marca registrada,
se trata de la Gran Mancha
Roja o GRS – su sigla en inglés – que corresponde a una turbulencia de tormenta
anticiclónica con un vórtice con un tamaño más grande que nuestro planeta Tierra; el remolino gira en sentido antihorario en dirección este-oeste.
En la actualidad, la
Gran Mancha Roja mide aproximadamente 16.500 kilómetros
de ancho, que es menos de la mitad de algunas de las mediciones históricas
efectuadas por astrónomos que han seguido esta reducción en el tamaño de la Mancha desde la década de
1930.
Desde el Centro
Goddard para Vuelos Espaciales de la
NASA ubicado en Greenbelt, Maryland el líder del equipo
investigativo Amy Simon confirma esta
reducción después de analizar las recientes observaciones efectuadas por el
Telescopio Espacial Hubble de la
NASA..
Desde fines de la
década de 1800, y mediante las
observaciones que se llevaron a cabo en ésa época, se había calculado que la
tormenta es inmensamente grande, midiendo alrededor de 41.000 kilómetros
en su largo eje. Posteriormente, a
través de los sobrevuelos alrededor de Júpiter realizados por las Naves
Espaciales Voyager 1 y Voyager 2 de la
NASA en el año 1979, se comprobó que media 23.300 kilómetros
de ancho. En 1995, el Telescopio
espacial Hublle tomó una imagen que entregó la información de que a lo largo
del eje de la Mancha ,
esta tenía un tamaño aproximado de 20.950 kilómetros
de ancho; y en el año 2009 su medido resultó ser de 17.900 kilómetros .
En el año 2012, los astrónomos aficionados iniciaron sus observaciones de la mancha revelando un
incremento en la velocidad a la cual se encoge de 933 kilómetros por
año, como así mismo, que la mancha cambia su forma pasando de ser un óvalo a
ser un círculo. “En nuestras
nuevas observaciones, es obvio que muy pequeños remolinos están adentrándose en
la tormenta”, dijo Simon. “Formulamos la
hipótesis de que ellos podrían ser los responsables del cambio acelerado al
alterar la dinámica interna y la energía de la Gran Mancha Roja”.
El equipo de Simon planea estudiar los movimientos de los
pequeños remolinos y la dinámica interna de la tormenta con el fin de
determinar si estos remolinos pueden alimentar o debilitar el impulso al
ingresar al vórtice en ascenso, lo que da como resultado este encogimiento
todavía inexplicado.
La nave especial Juno, de la NASA ; se encuentra ahora camino a Júpiter y
llegará al planeta gigante en julio del año 2016. Los análisis de cerca que
realicen sus instrumentos ayudarán, sin duda, a revelar el misterio.
A su debido tiempo, la información de la evolución de la Gran Mancha Roja se
actualizarán mediante las mediciones proporcionadas por el Hubble y por Juno.
Fuente: Ciencia@NASA /Wikipedia
No hay comentarios:
Publicar un comentario