martes, 22 de marzo de 2016

"SUCHAI" PRIMER SATÉLITE CHILENO QUE IRÁ AL ESPACIO

Suchai (de la sigla en inglés Satellite of the University of Chile for Aerospace Investigation: "Satélite de la Universidad de Chile para la Investigación Aeroespacial"; y de la palabra en mapudungún Suyai: "esperanza") es el primer satélite artificial diseñado y desarrollado localmente en Chile.
Se trata de un pequeño satélite de 10 cm³ (volumen de 1 litro) y alrededor de 1 kg, construido bajo el estándar académico Cubesat por el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile.
Este nano satélite de la Universidad de Chile, fue desarrollado  por el sector de investigación aeroespacial, convirtiéndose en el primer CubeSat chileno fabricado por estudiantes universitarios, ingenieros y profesores de ingeniería eléctrica y física del Departamento de Ingeniería Mecánica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile; su objetivo principal es aprender todo el proceso de diseño, construcción e integración para ponerlo en funcionamiento y en marcha, este pequeño satélite, denominado 1U Cubesat  el cual consta de tres subsistemas principales.
El micro satélite partirá en los primeros días de abril de  2016 a Holanda, para ser ensamblado en el cohete  que será lanzado en los Estados Unidos durante los primeros meses del presente año, para “Sentar los cimientos para  experimentos específicos, avanzar en los estudios tecnológicos para observar la Tierra, para mejorar las comunicaciones y astronómicas, además, de ir formando capital humano”, dice Marcos Díaz, profesor del Departamento de Ingeniería Eléctrica.
Por su pequeño tamaño,  SUCHAI es un nano-satélite  de investigación CubeSat, que por su pequeño tamaño, permitió abaratar  los costos que permiten sea integrado en el cohete que lo llevará al espacio. El profesor a cargo del proyecto, ha dicho: “El 12 de abril nos vamos a Holanda a implementar  nuestro sistema completo en el cohete. Iremos al espacio en el Cohete Falcon 9”. El lanzamiento del cohete está previsto para que se realice entre los meses de junio a julio de 2016,  Marcos Días recalca “El cohete debe estar listo, la NASA fija el lanzamiento con dos días de anticipación, dependiendo del clima, tormentas solares y muchos factores más”.
Carlos González, alumno que trabajó en el proyecto SUCHAI, afirmó que en Chile si se puede realizar y desarrollar tecnología de punta y aseveró que “Queremos cambiar el pensamiento que hay en el país en cuanto a desarrollo de ciencia y tecnología, es un gran desafío”. Por su parte, el ingeniero del proyecto, Alex Becerra, ha recalcado que: “Mi motivación es desarrollar esta tecnología, impulsar el desarrollo espacial en Chile”.

Además, los miembros del equipo afirmaron que ya están trabajando en dos nuevos proyectos, los SUCHAI 2 y 3 que serán de mayor tamaño y buscarán llegar nuevamente al espacio.
El satélite construido en Chile, y que podría llegar al espacio a mediados del presente año, fue financiado totalmente por la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile y será exhibido en FIDAE 2016.
Fuente: Wikipedia / Google alerta / La Tercera – tendencias / FCFM 

VIENTO SOLAR EN EQUINOCCIO


Un gran agujero se formó  por encima del polo norte de la atmósfera  del Sol, la cual está  expeliendo un fuerte viento solar hacia el espacio,  el cual está siendo  monitoreado por el Observatorio de Dinámica Solar de la NASA, es  la zona en azul profundo que se ve en la imagen ultravioleta extrema  obtenida el 21 de marzo de 2016.
Este tipo de agujero  en la atmósfera solar,  se le llama “agujero en la corona” (coronal hole en inglés), los cuales son  lugares donde el campo magnético del Sol se abre y permite que el viento solar se escape. En la imagen se puede observar como el flujo de plasma del viento solar está trazado mediante flechas de color blanco.
Una corriente de viento solar que fluye de este agujero coronal es probable que llegue a la Tierra entre los días  22 al 23 de marzo. 
Debido a la latitud norte del agujero en el Sol, la corriente emergente podría no golpear directamente a la Tierra. En cambio, podría desplazarse  hacia el norte de nuestro planeta y sólo entregue un golpe oblicuo al campo magnético terrestre. Estas son buenas noticias para los observadores del cielo: En esta época del año, un golpe oblicuo puede ser suficiente para provocar auroras brillantes. Por razones que puedan ser entendidos sólo parcialmente, las semanas alrededor de los equinoccios favorecen  las tormentas geomagnéticas. Incluso una ráfaga suave de viento solar puede producir una magnífica muestra. 

Fuente: Space Weather 21.marzo.2016