sábado, 30 de mayo de 2020

SE DESHACE EL COMETA INTERESTELAR 2I/Borisov,


Tal como dijo Stephen Hawkin: "La Humanidad deberá ser capaz de salir de la Tierra en estos próximos 100 años". 
Y según los avances de la Astronomía vamos por buena trayectoria.


En la secuencia de imágenes que tomó el telescopio espacial Hubble del Cometa inter-estelar 2I/Borisov (2019/Q4-Borisov-), a finales del mes de marzo del 2020, se puede apreciar cómo se divide su núcleo.


Crédito de la imagen: NASA / ESA / HST / David Jewitt

Esta secuencia de imágenes del Telescopio Espacial Hubble muestra el cometa 2I / Borisov dividiéndose. (Imágenes en falso color).

El cometa interestelar 2I/Borisov fue descubierto el 30 de agosto de 2019, por el astrónomo aficionado, Gennady Borisov, desde su observatorio personal (MARGO) en Nauchnij (Crimea).


La afición por la Astronomía no tiene límites. Lleva desde el mero hobby por la observación, o la fotografía, hasta la exploración o investigación espacial.
Así es la ciencia que cuenta con el mayor número de seguidores apasionados, desde exploradores siderales como Mr. Borisov, a genios de la excelencia como la del Dr. Stephen William Hawking.

El cometa Borisov es un objeto estelar en vuelo a través de nuestra Galaxia, no sujeto a la gravedad de ninguna estrella que, a su paso por nuestro sistema planetario, fue afectado por la propia atracción del Sol y desviado de su curso, como se ve en los gráficos y en el seguimiento que se hizo de su trayectoria; pero debido a su alta velocidad de crucero, no fue lo suficiente como para quedar atrapado en nuestro sistema solar.

Para el cometa Borisov, por la excentricidad de su órbita (es una curva hiperbólica de excentricidad mayor que 3, cuando los objetos que orbitan al Sol desarrollan elipses de excentricidad entre 0 y 1), los científicos pudieron determinar que su procedencia era de otro sistema estelar. ¿Cuál? Tampoco sabemos hacia donde se dirige, pero sí que, en estos momentos, su núcleo se ha divido en dos, o más cuerpos.


Créditos: NASA, ESA y D. Jewitt (UCLA)

Imágenes del cometa 2I/Borisov tomadas por el telescopio espacial Hubble de la NASA, que al mismo tiempo captura (izquierda) la de la galaxia espiral de fondo distante 2MASX J10500165-0152029, y poco después la de su aproximación al Sol (derecha).

Los científicos, en general, han concluido que este es el segundo objeto interestelar conocido. El primero fue el asteroide A/1I/2017U1 («Oumuamua»), descubierto el 19 de octubre de 2017, cuando ya se alejaba de la Tierra, por el telescopio «Pan-Starrs», del Instituto de Astronomía de la Universidad de Hawai.

Según las observaciones realizadas en su momento por el equipo de Astronomía de la Universidad de Hawái, para el cometa Borisov, se estimó un núcleo con diámetro de entre 2 y 16 kilómetros. Pero actualmente se sabe que esa medición no es correcta (según observaciones del telescopio Hubble, entre otras), muy al contrario; comparado con otros cometas de nuestro propio sistema planetario: El cometa Halley de un diámetro de 11 kilómetros, el cometa Encke de 4,8 kilómetros, y otros de hasta 20 kilómetros; el cometa Borisov es escaso de tamaño (de 500 metros máximo de diámetro).

La alta gravedad del Sol ha desviado, ligeramente, su trayectoria al paso por nuestro sistema planetario pero, debido a la altísima velocidad de su vuelo (más de 160.000 kms/h), aunque es tan pequeño de tamaño, no es lo suficiente como para atraparlo y que no continuara hacia otra estrella de nuestra galaxia (hasta ahora).

Llegara el 8 de diciembre del 2020 a su máxima aproximación al Sol (a unos 300 millones de kilómetros, en la parte interior del Cinturón de Asteroides), pero un cometa que, según los datos publicados sobre su composición: «el cometa debe haberse formado a partir de material muy rico en hielo de monóxido de carbono (CO), que solo está presente a las temperaturas más bajas que se encuentran en el espacio, por debajo de -250º C, y  en cianuro de hidrógeno (CHN)», como dijo la Dra. Stefanie Milam (científica planetaria en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland); proviene del espacio lejano y frío, al acercarse al Sol, aunque sea a esa distancia, alcanzó una temperatura lo suficiente como para que sus componentes de hielo se evaporaran y formaran ese coma (o cola), de escombros helados de 160.000 kilómetros de largo (el diámetro de la Tierra es de 12.742 kilómetros).

Los cometas interestelares son de particular interés para los astrónomos porque pueden contar muchas cosas a los científicos sobre la formación y evolución de sistemas estelares distintos al nuestro y ya que, de momento, no tenemos una tecnología suficientemente eficaz como para poder viajar a otras estrellas (la nave más veloz que tiene la Humanidad es la sonda Parker Solar Probe de NASA, que vuela a 324.000 kms/hora con el objetivo de explorar la corona solar, y la estrella más cercana es Próxima Centauri distante 4,2 años luz de nuestro sistema, por lo que a la velocidad de crucero de la sonda Parker, se necesitarían varios cientos de miles de años en llegar hasta ella), es por ello muy importante poder analizar objetos que provengan de otras estrellas.



Trayectoria del cometa Borisov. Credit NASA, ESA, J. Olmsted y F. Summers (STScl)

Los cometas no son trozos sólidos de roca. Contienen abundantes sustancias volátiles, incluida agua, congeladas en gran cantidad entre sus fracturas y grietas. Cuando un cometa se acerca al Sol, se calienta y algunos de esos volátiles se subliman en gases que escapan al espacio produciendo el coma.

En este caso de la división del cometa Borisov, los científicos procuran estudiar los gases que desprende y cómo afectará a su trayectoria (ahora de dos cuerpos, o más). 
Según el profesor Mike Brown (Instituto de Tecnología de California-Caltech-): «In general, splitting probably means there was some gas pressure build up that pushed pieces apart. So the pieces have very slightly different velocities thus very slightly different orbits. But, overall, the orbit should stay the same!» (En general, la división probablemente significa que hubo una acumulación de presión de gas en el cometa lo cual lo dividió en piezas diferentes. Entonces las piezas tienen diferentes velocidades, por lo tanto, órbitas muy ligeramente diferentes. Pero, en general, ¡la órbita debe permanecer igual!).

Cuando un cometa se rompe, dependiendo del tamaño de los residuos y de su trayectoria, la sección transversal de los escombros que se extiende por el espacio, o la longitud de su coma, a menudo se hace mucho más grande que el diámetro de la Tierra. Esto significaría que, si en función de las nuevas masas y de la velocidad de los restos, cambiara de trayectoria por la interacción gravitatoria con el Sol y nuestros grandes planetas (Jupiter, Saturno, Neptuno, etc.), esos nuevos objetos productos de la división, podrían cambiar significativamente la trayectoria de su órbita. Dependiendo de su cercanía, ello llevaría a posibles impactos de la Tierra (o de la Luna) con esos escombros, algo mucho más probable que un impacto directo con el núcleo del cometa.

Entre otros aspectos, estos objetos interestelares, probablemente han estado viajando entre estrellas de nuestra Galaxia durante cientos de miles (o incluso millones) de años. Sin duda recogieron materiales en su trayectoria, o llevan las marcas de colisiones con otros objetos o fuerzas. Por lo tanto, su composición y características de la superficie pueden decir mucho a los astrofísicos, sobre lo que hay en el medio interestelar. Para ello, varias Compañías y Agencias espaciales, están desarrollando sistemas para ir al encuentro de estos cometas y tomar muestras directamente de ellos. Uno de los proyectos más importantes es «Comet Interceptor» de la Agencia Espacial Europea (ESA).

«Comet Interceptor» tiene como objetivo científico principal caracterizar, por primera vez, un cometa u objeto interestelar dinámicamente nuevo, incluidos sus componentes superficiales, forma, estructura, y la composición de su coma gaseoso.

Se lanzará con la nave espacial ARAEL de la ESA en 2028 y se situará en el Punto L2 de Lagrange Sol-Tierra, donde se encuentran ya varios satélites astronómicos (punto estable gravitacionalmente a una distancia de 1,5 millones de kilómetros de la Tierra) y estará lista en el espacio para actuar rápidamente cuando se localice la llegada de algún objeto susceptible del estudio necesario. Será una nave espacial con elementos múltiples que comprenderán: Una plataforma primaria que actuará como centro de comunicaciones, y una nave sub-espacial, que permitirá observaciones multi-punto alrededor del objetivo. Todo ello funcionará con energía solar.


Puntos De Lagrange: created by NASA

 Tal como dijo Stephen Hawkin: «La Humanidad deberá ser capaz de salir de la Tierra en estos próximos 100 años». 
Y según los avances de la Astronomía vamos por buena trayectoria.

Autor:  
San Joaquin de Flores, 05/05/2020

Referencias:

José Mª Moreno Ibáñez (AC 19/52), 




Es Arquitecto Técnico por la Universidad Complutense de Madrid.Socio fundador de la Asociación de Astronomía “Astromares” (Sevilla-2007)
Astrónomo aficionado (especialidad Asteroides y Cometas). Ha cursado Astronomía por The University of Arizona. «Observación de la Tierra desde satélites» (Agencia Espacial Europea) y «El cielo nocturno» Orion. (Open University London)



Compilado por Soca de: LA REVISTA Opinión viernes 29 de mayo de 2020


Traducción libre de Soca

viernes, 29 de mayo de 2020

LAS LLAMARADAS SOLARES MÁS FUERTES DESDE 2017


Por primera vez en más de dos años, el Sol está brillando intensamente

Hoy, 29 de mayo, los satélites en órbita terrestre detectaron una llamarada solar de clase M1 (07:24 UT)-[03:24 hr. Chile continental] seguida de una llamarada clase C9 (10:46 UT) [06:46 Chile continental]. Ambas provenían de una probable mancha solar que se escondía justo detrás de la extremidad noreste del Sol. 

La imagen del Observatorio de Dinámica Solar de la NASA muestra material arrojado por una de las explosiones:


 Arriba: material arrojado por una llamarada solar el 29 de mayo de 2020. Crédito de la imagen: NASA / SDO

Estas son las erupciones solares más fuertes desde el 20 de octubre de 2017, la última vez que el Sol produjo una erupción de clase M. 
De hecho, podrían ser aún más fuertes de lo que parecen. Las explosiones fueron parcialmente eclipsadas por el borde del Sol, reduciendo su intensidad aparente.

Hasta ahora, las erupciones no han afectado mucho a la Tierra. La mancha solar subyacente se encuentra lejos de nuestro planeta. Sin embargo, eso podría cambiar pronto. La rotación solar traerá el punto sobre la extremidad dentro de las próximas 24 a 48 horas

Las futuras erupciones podrían ser geo-eficaces.
Técnicamente, no sabemos con certeza si la región activa * es * una mancha solar. Los núcleos oscuros subyacentes aún no se han avistado. La confirmación espera una mejor geometría de visualización, probablemente mañana. 
¡Manténganse al tanto! Alertas Aurora: Textos SMS .

Fuente: Space Weather (Clima Espacial) 29 de mayo de 2020

Nota: Las grandes tormentas pueden tener consecuencias devastadoras en las ciudades y su población, pero deberíamos preocuparnos más por otro tipo de fenómeno: Si la Tierra fuese golpeada por una gran tormenta solar, la tecnología quedaría totalmente inutilizada, con las fatales consecuencias que eso conlleva”.

De Actualidad.rt


Traducción libre de Soca


EL HUBBLE LOGRA NUEVA IMAGEN DE UN OBJETO INTERESTELAR


Nueva imagen del Hubble de objeto interestelar

El Telescopio Espacial Hubble de la NASA ha dado a los astrónomos su mejor mirada hasta el momento, de un visitante interestelar, el cometa 2I / Borisov, cuya velocidad y trayectoria indican que se encuentra fuera de nuestro Sistema Solar.

Esta imagen del Hubble, tomada el 12 de octubre de 2019, es la vista más nítida del cometa.
El Hubble revela una concentración central de polvo alrededor del núcleo helado sólido.
Para más información visite https://nasa.gov/hubble.

Crédito: Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA Paul R. Morris (USRA): Productor Líder
Créditos de la música: "Solar Pilgrims" de Francois Vey [SACEM] Universal Production Music
Este video es de dominio público y junto con otras visualizaciones de apoyo se pueden descargar del Scientific Visualization Studio en:

Fuente: NASA Goddard - 28 de mayo de 2020


Traducción libre de Soca

jueves, 28 de mayo de 2020

¿LO VISTE AYER? SI LA RESPUESTA ES SÍ CONOCISTE A LA ASTROFÍSICA CHILRNA ADELINA GUTIÉRREZ, QUE FUE HOMENAJEADA CON UN DOODLE DE GOOGLE


Fue la primera mujer de nuestro país en obtener un doctorado en Astrofísica y la primera mujer en integrarse a la Academia Chilena de Ciencias. El buscador de Google conmemora a la profesora, académica y pionera de la astronomía, Adelina Gutiérrez a 95 años de su nacimiento.


Cada vez que alguien de Chile, Argentina y Perú accedía al buscador de Google el miércoles 27, pudo ver la ilustración de Carmen Adelina Gutiérrez Alonso

Esta científica chilena, nacida en Santiago en un día como ayer del año  1925, fue una mujer pionera por su interés en el estudio de la Astrofísica, ciencia que aplica la física a elementos como las estrellas, los planetas y las galaxias.

Ingresó a la carrera de Pedagogía en Física y Matemática en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, donde se tituló de profesora de Estado en 1948. Al año siguiente comenzó a ejercer como profesora de ciencias en el Liceo Darío Salas y en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, donde a partir del 1 de junio de 1949 trabajó en el histórico Observatorio Astronómico Nacional. 
En dicho recinto se dedicó inicialmente a reducir datos astronómicos obtenidos por otros científicos, para luego desarrollarse en el campo de la fotometría fotoeléctrica de estrellas australes, tema que abordó en numerosas publicaciones. 

Adelina Gutiérrez viajó a Estados Unidos a fines de la década de los 50 para realizar un doctorado en Astrofísica, el cual obtuvo en junio de 1964, convirtiéndose en la primera mujer chilena en alcanzar ese grado académico. “Para mi fue un ejemplo, ya que ella ya tenía una familia de dos hijos, igual tuvo la fuerza para ir a doctorarse. Se fue se fue sola y regresó y tuve la suerte de tenerla como profesora en muchos cursos”, recuerda María Teresa Ruiz; la astrónoma y Premio Nacional de Ciencias Exactas. Describe a Adelina como una “visionaria y una mujer con mucho coraje”. A quién le debe no solo “lo que me enseño como profesora, sino que también su ejemplo como mujer capaz de realizar sus sueños”.

Además, la científica conmemorada el día de ayer, fue una de las fundadora de la carrera de Licenciatura en Astronomía en la Universidad de Chile. “Es una figura que debería ser conocida por toda la gente porque realmente hizo algo que no se había hecho antes en el país: ser la primera y sobre todo mujer, en convertirse en astrónoma profesional”, expresa Laura Pérez, astrónoma y académica del Departamento de Astronomía de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile.

El doodle

Los doodles son intervenciones artísticas con las que Google reemplaza su tradicional logo en ocasiones especiales, y que buscan celebrar la cultura y despertar la curiosidad en torno a la vida de personas y eventos relevantes a nivel mundial, hitos históricos y grandes festividades. Además de la ilustración alegórica incluyen un link con resultados de búsqueda que contiene información sobre el personaje o la fecha que destacan. En este caso, el link muestra información relevante sobre la astrofísica chilena Adelina Gutiérrez. 

Para Adelina el cielo no era el límite, y en Google estamos orgullosos de poder celebrar la vida y obra de esta mujer que sin duda dejó una gran huella en su campo de acción”, señala Ana María Gómez, gerenta de Marketing de Google Chile y líder de Women@Google en Chile.
  


Encargado de realizar la ilustración de Adelina Gutiérrez, fue el artista chileno Pablo Luebert. Señala que para crear el doodle recurrió al trabajo e imágenes de la científica en busca de inspiración, y recuerda que entre lo que más le gustó es “la idea de que ella fuera a trabajar y se detuviera a mirar las estrellas rápidamente, como si no pudiera evitar mirar hacia arriba”.


En este sentido, espera que su trabajo incentive a quienes tengan la posibilidad de verlo a “mirar para arriba. 
Frecuentemente en la vida vamos mirando hacia abajo, y espero que esto nos permita mirar hacia arriba y soñar más seguido”, dice Luebert

Fuente: Futuro 360

Traducción libre de Soca

martes, 26 de mayo de 2020

¿ESTÁ LA ANOMALÍA DEL ATLÁNTICO SUR DIVIDIÉNDOLO EN DOS?

Arriba: La Anomalía del Atlántico Sur (azul codificado por colores) puede estar dividiéndose, según este mapa magnético de la nave espacial Swarm de la Agencia Espacial Europea.

Nuevos datos de los satélites europeos de Swarm muestran que algo extraño está ocurriendo en el campo magnético de la Tierra. La anomalía del Atlántico sur podría estar dividiéndose en dos. "Un nuevo mínimo oriental de la Anomalía del Atlántico Sur ha aparecido en la última década", dice Jürgen Matzka, del Centro de Investigación de Geociencias de Alemania. "En los últimos años se ha desarrollado vigorosamente".

Arriba: Desarrollo de la Anomalía del Atlántico Sur de 2014 a 2020. Crédito: ESA / Swarm. [más] 

La anomalía del Atlántico sur es un punto débil en el campo magnético de la Tierra centrado aproximadamente en el lado atlántico de América del Sur. Descubierto en 1958, ha estado creciendo y cambiando durante décadas. Los últimos datos de Swarm muestran un nuevo punto débil que se forma justo en el extremo sur de África.

"Somos muy afortunados de tener los satélites Swarm en órbita para investigar este desarrollo", dice Matzka.

Lanzado en noviembre de 2013, Swarm es una constelación de 3 satélites idénticos que vuelan en formación alrededor de la Tierra.
Están equipados con magnetómetros, rastreadores de estrellas y otros instrumentos, que permiten a los satélites realizar mediciones 3D exquisitamente detalladas del campo magnético de la Tierra. Muchos hallazgos significativos .

Los investigadores saben desde hace tiempo que el campo magnético de la Tierra se está debilitando. En los últimos 200 años, el campo magnético promediado a nivel mundial ha perdido alrededor del 9% de su fuerza, con la Anomalía del Atlántico Sur a la cabeza. De 1970 a 2020, la intensidad de campo mínima en esta área se redujo de 24,000 a 22,000 nanoteslas (*).

Arriba: Los ataques de radiación detectados por Swarm se concentran en la Anomalía del Atlántico Sur. Crédito: ESA

A medida que la Anomalía del Atlántico Sur se ha debilitado, el Cinturón Van Allen interno se ha derramado en él, permitiendo que las partículas energéticas (especialmente los protones) se acerquen a 200 km de la superficie de la Tierra. Esto representa una pequeña amenaza para las personas en el terreno, pero las naves espaciales no tienen tanta suerte. Cuando los satélites vuelan a través de la anomalía, están expuestos a una radiación relativamente fuerte. Las computadoras a bordo pueden reiniciarse y las cámaras digitales pueden empañarse con rayas de partículas cargadas que las atraviesan. La ISS tiene un blindaje adicional para tratar este problema, y ​​el telescopio espacial Hubble ni siquiera se molesta en hacer observaciones cuando está dentro de la anomalía.

Si la Anomalía del Atlántico Sur finalmente se divide en dos celdas, los planificadores de misiones satelitales tendrán que lidiar con una nueva zona de alta radiación. Sin embargo, la división es más que una molestia. Podría ofrecer pistas sobre el origen de la anomalía en sí. El campo magnético de la Tierra es creado por las corrientes de hierro líquido sobrecalentado que se arremolinan ~ 3000 km debajo de nuestros pies. Los cambios "aquí arriba" pueden decirle a los investigadores qué está pasando "allá abajo".

Manténganse atento a las actualizaciones a medida que continúa la misión Swarm.

 Fuente: SPACE WEATHER (Clima Espacial) – miércoles 27 de mayo de 2020


(*) Un Tesla se define como la inducción de un campo magnético que ejerce una fuerza de 1 N (newton) sobre una carga de 1 C (coulomb) que se mueve a velocidad de 1 m/s dentro del campo y perpendicularmente a las líneas de inducción magnética.

10−9 T
nT
nanotesla
  Fuente: Wikipedia

Traducción  libre  de Soca

domingo, 24 de mayo de 2020

LA ANTÁRTICA SE ESTÁ VOLVIENDO VERDE POR EL CAMBIO CLIMÁTICO


Proliferan algas microscópicas como consecuencia de la subida de las temperaturas

El cambio climático está provocando que partes de la Antártida costera se vuelvan verdes por el florecimiento de algas, que se extienden a medida que suben las temperaturas. Pueden verse desde el espacio.

Algas verdes en la Antártica. Foto: Sarah Vincent.

Científicos británicos han observado el crecimiento de algas microscópicas en partes de la Antártida, que están convirtiendo en verde el continente blanco por efecto del cambio climático.

Estos científicos han creado el primer mapa a gran escala de estas algas a medida que florecen en la superficie de la nieve a lo largo de la costa de la península antártica.

Aunque cada alga individual es de tamaño microscópico, cuando crecen en masa convierten la nieve en verde brillante y pueden verse desde el espacio, destacan los investigadores

El equipo de científicos, pertenecientes a la Universidad de Cambridge y el British Antarctic Survey, combinó datos satelitales con observaciones en el terreno durante dos veranos en la Antártida para detectar y medir las algas verdes de la nieve.

El mapa se utilizará para evaluar la velocidad a la que el continente blanco se está volviendo verde debido a la crisis climática.

In crescendo

Los resultados de esta investigación, publicados en Nature Communications, indican que esta nieve verde se extenderá por la Antártida a medida que sigan aumentando las temperaturas globales

La península es la parte de la Antártida que experimentó el calentamiento más rápido de todo el planeta en la última parte del siglo XX.

La tendencia al calentamiento prosigue en la región antártica: el pasado enero, la Antártida Oriental registró su primera ola de calor, con temperaturas casi 7ºC por encima de la media.

"A medida que la Antártida se calienta, pronosticamos que la masa total de algas nevadas aumentará", señala Andrew Gray, autor principal del artículo, en un comunicado.

Son costeras

Las floraciones de algas verdes de nieve se encuentran alrededor de la costa antártica, particularmente a lo largo de la costa oeste de la península.

Crecen en las áreas más cálidas, donde las temperaturas promedio son de poco más de cero grados centígrados durante el verano austral (de noviembre a febrero).

Casi dos tercios de las floraciones de algas verdes se encuentran en islas pequeñas y bajas sin terreno elevado.

Sin embargo, la mayoría de las algas de nieve se encuentran en el norte de la Península y las Islas Shetland del Sur, en áreas donde pueden extenderse a tierras más altas a medida que la nieve baja se derrite.

Junto a animales

El equipo descubrió asimismo que la distribución de las algas verdes de la nieve también está fuertemente influenciada por las aves marinas y los mamíferos, cuyo excremento actúa como un fertilizante natural altamente nutritivo para acelerar el crecimiento de algas.

Más del 60% de las flores se encontraron a menos de cinco kilómetros de una colonia de pingüinos.

También se observó que las algas crecían cerca de los sitios de anidación de otras aves, incluidos los skuas (págalos grandes), y las áreas donde las focas llegan a tierra.

Sumideros de carbono

Las algas de nieve son un componente clave de la capacidad del continente para capturar dióxido de carbono de la atmósfera a través de la fotosíntesis, destacan los investigadores.

La fotosíntesis es el proceso mediante el cual las plantas y las algas generan su propia energía: utilizan la luz solar para capturar dióxido de carbono de la atmósfera y liberar oxígeno.

La mayoría de las algas viven en ambientes acuosos, y cuando hay exceso de nitrógeno y fósforo disponibles, pueden multiplicarse rápidamente para crear floraciones de algas visibles.

Los investigadores identificaron casi 2 kilómetros cuadrados de superficie ocupada por algunas de estas algas, que podrían haber capturado alrededor de 479 toneladas de dióxido carbono (CO2) por año: es el equivalente a 875.000 viajes en coches de gasolina por el Reino Unido.

Los investigadores dicen que la cantidad total de carbono contenida en las algas de nieve antárticas es probable que sea mucho mayor, porque el dióxido de carbono también es absorbido por otras algas rojas y anaranjadas, que no se pudieron medir en este estudio.

Pequeñas algas que se vuelven verdes sobre la nieve proliferan en las costas antárticas. Foto: Matt Davey.

Ecosistema crítico

La Antártida es el continente más austral del mundo, típicamente conocido como una tierra congelada de nieve y hielo. Pero la vida terrestre puede ser abundante, particularmente a lo largo de su costa, y está respondiendo rápidamente a los cambios climáticos en la región.

Los musgos y los líquenes forman los dos mayores grupos visibles de organismos fotosintéticos, y han sido los más estudiados hasta la fecha.

Este nuevo estudio ha encontrado que las algas microscópicas también juegan un papel importante en el ecosistema de la Antártida y su ciclo del carbono.

Referencia Remote sensing reveals Antarctic green snow algae as important terrestrial carbon sink. Andrew Gray et al. Nature Communications, volume 11, Article number: 2527 (2020). DOI:https://doi.org/10.1038/s41467-020-16018-w

Fuente: TENDENCIAS 21- TENDENCIAS CIENTIFICAS - 22 DE MAYO DE 2020

Traducción libre de Soca