martes, 12 de enero de 2010

SOFIA

El 05 de enero de 2010, NASA informó que el 18 de diciembre de 2009, efectuó la prueba de vuelo el Observatorio Estratosférico para Astronomía Infrarroja (SOFIA: Stratospheric Observatory for Infrared Astronomy, en idioma inglés), voló a bordo de un avión Boeing 747 modificado, a 4.570 m (15.000 pies) de altura por una hora y 19 minutos. Durante dos de esos minutos, la puerta del telescopio fue abierta completamente.
La apertura de la puerta, que se hacía por primera vez, permitió averiguar si el abrirla afectaba el vuelo y manejo del avión y si causaba resonancia acústica o que algo se soltara en la cavidad debido al viento. La prueba fue un éxito porque no se detectaron problemas, en especial que la estructura del avión y el telescopio vibraran.
Este telescopio infrarrojo, de 2,5 m (98 pulgadas) estará, en última instancia, destinado a volar a 12.200 m (40.000 pies) de altura y estudiará una gran varidedad de objetos astronómicos durante su vida útil que, se espera, sea de 20 años. Estos objetos incluyen a otras galaxias y al centro de nuestra propia galaxia, la Vía Láctea, así como también al medio interestelar (especialmente a los constituyentes básicos para la vida que éste posee), la formación de las estrellas y planetas y además los cometas y asteroides en nuestro sistema solar.
Antes de la prueba de primera luz, programada para el mes de abril, se han planeado más pruebas para la primavera (boreal) de 2010, antes de que el telescopio SOFIA pueda comenzar sus operaciones científicas en el otoño (boreal).
La prueba de primera luz, en la que se tomará una imagen y se caracterizará con el telescopio, será en realidad la primera prueba verdadera; por cuanto al quitarle los seguros al telescopio y sacarlo de su cavidad, permitirá moverlo como si se estuviera realmente observando mientras el viento lo estará azotando y sacudiendo.
Para mantener el telescopio lo suficientemente fijo, descansa sobre grandes monturas de absorción de choques, que lo aislan de las vibraciones mecánicas del aeroplano. En la parte trasera de la cavidad, hay una rampa que recoge el flujo de aire que ingresa y lo envía hacia atrás, por encima de la rampa y afuera de la cavidad. SOFIA también cuenta con contrapesos, que pueden ser medidos y ajustados para corregir cualquier tipo de sacudimiento. El sistema de dirección puede mover el telescopio hacia adelante y hacia atrás con el fin de compensar las vibraciones de baja frecuencia o los movimientos del aeroplano. Además, el espejo secundario puede incluso ser oscilado para contrarrestar el sacudimiento de la imagen en sí misma.
(Fuente: Ciancia@NASA - Bob Meyer Centro Dryden para Investigaciones de Vuelo - NASA News 08.enero.2010 http://ciencia.nasa.gov)