martes, 26 de marzo de 2019

POR FIN BLINDAN EL INTERNET DEL CUERPO HUMANO

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Las propiedades conductoras del organismo protegen los marcapasos y otros dispositivos implantados

Investigadores norteamericanos han ideado un sistema para blindar el Internet del Cuerpo, que controla la salud de las personas con dispositivos implantados. Usa las propiedades conductoras del organismo: no se pueden hackear y consumen 100 veces menos energía.


El cuerpo humano conduce bien las señales eléctricas. Ahora, estas señales se pueden contener muy cerca del cuerpo, gracias a la nueva tecnología desarrollada por los ingenieros de la Universidad de Purdue.
Credito de la imagen:Erin Easterling / Purdue College of Ingineering

Investigadores estadounidenses han desarrollado la manera de proteger los 
dispositivos electrónicos que controlan nuestra salud de posibles ataques futuros, gracias a una tecnología que mantiene las señales de comunicación dentro del propio cuerpo.
  
Los dispositivos médicos electrónicos, como los marcapasos o las bombas de insulina, son susceptibles de ser pirateados. La intercepción de las señales inalámbricas podría ser peligrosa y, aunque aún no se haya producido ninguna muerte mediante este procedimiento, los investigadores han demostrado durante la última década que es posible.
  
Antes de que eso ocurra, los ingenieros de la Universidad de Purdue, en Estados Unidos, han logrado reforzar la seguridad de los dispositivos electrónicos que se emplean para controlar la salud y se conectan a Internet, de tal manera que el usuario sea el único capaz de acceder a su red inalámbrica

El “Internet del cuerpo" 
Muchos de los objetos que empleamos en nuestra vida cotidiana están conectadas a internet. El británico Kevin Ashton propuso en 1999 el concepto de “Internet de las cosas” (IdC) para referirse a esta interconexión.
  
En la actualidad, existen diferentes dispositivos, incluidos en el grupo anterior, que pueden usarse en nuestro cuerpo (interna o externamente) para medir diferentes parámetros y controlar nuestra salud o nuestra actividad física.
Al conjunto de estos dispositivos podríamos llamarlo “Internet del cuerpo”.

 

"Estamos conectando cada vez más dispositivos a la red del cuerpo humano, desde relojes inteligentes y monitorizadores de la actividad física, hasta cascos con sistemas de visualización de realidad virtual", explica Shreyas Sen, profesor asistente de ingeniería eléctrica e informática, en un comunicado
  
Prototipo de comunicación inalámbrica
"El desafío no solo ha sido mantener esta comunicación dentro del cuerpo para que nadie pueda interceptarla, sino también obtener un mayor ancho de banda y un menor consumo de batería", señala Sen, quien está especializado en sistemas de detección y comunicación. 
  
Los fluidos corporales conducen muy bien las señales eléctricas. Hasta ahora, las llamadas "body area networks", o “redes de área corporal” (áreas de comunicación inalámbrica entre dispositivos de baja potencia utilizados en el cuerpo) han utilizado la tecnología Bluetooth para enviar señales a través y alrededor del cuerpo. El problema es que estas ondas electromagnéticas pueden recogerse en un radio de al menos 10 metros alrededor de una persona y ser potencialmente interceptadas y manipuladas por otra persona malintencionada. 
  
Lo que ha conseguido el equipo de Sen es usar el cuerpo como escudo que impida esta interferencia en el funcionamiento del Internet del cuerpo. En vez de utilizar Bluetooth para enviar señales entre los diferentes dispositivos situados dentro del cuerpo, usa las propiedades conductoras del organismo, las comunicaciones electro-quasistáticas presentes en el cuerpo humano (EQS-HBC), que transmiten una señal de radio de baja frecuencia. 

Esta señal no es perceptible a 10 metros del cuerpo, como ocurría con la de Bluetooth, sino que no llega más allá de un centímetro, lo que dificulta que pueda ser hackeada. Además, consume 100 veces menos energía que el dispositivo con conexión Bluetooth.   

Un dispositivo mantiene las señales de comunicación dentro del cuerpo, para que nadie pueda piratear equipos médicos como los marcapasos. Imagen: Debayan Das / Purdue College of Engineering.

Red de área corporal encubierta 
A través de un reloj prototipo, una persona puede recibir así una señal desde cualquier parte del cuerpo, con independencia del grosor de su piel o cabello, y con total seguridad. 
  
Esta tecnología permitirá a los médicos reprogramar los dispositivos médicos sin cirugía invasiva. También ayudará a racionalizar la llegada de la medicina bioelectrónica de circuito cerrado, en la que los dispositivos médicos portátiles e implantables funcionan como medicamentos, pero sin efectos secundarios. Por último, será útil para las imágenes cerebrales de alta velocidad, con aplicaciones en neurociencia, según los investigadores. 

"Mostramos por primera vez una comprensión física de las propiedades de seguridad de la comunicación del cuerpo humano para permitir una red de área corporal encubierta, para que nadie pueda fisgonear información importante", apunta Sen. 
Fuente:Tendencias Científicas  – Eva Reneses - 22.marzo.2019
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Referencia
Enabling Covert Body Area Network using Electro-Quasistatic Human Body Communication. Debayan Das et al. Scientific Reports, 11 March 2019. DOI: https://doi.org/10.1038/s41598-018-38303-x.

lunes, 25 de marzo de 2019

NUESTRO CEREBRO REACCIONA A LAS VARIACIONES DEL CAMPO MAGNÉTICO TERRESTRE


Tenemos un sexto sentido magnético similar al que usan algunos animales para orientarse

El cerebro humano es capaz de reaccionar a las variaciones en el campo magnético terrestre, por lo que dispone de un sexto sentido similar al que poseen otras especies animales para orientar su navegación.


 
El video muestra los cambios en la amplitud de la onda alfa al percibir las rotaciones del campo magnético de la Tierra. A la izquierda, las rotaciones en sentido contrario a las agujas del reloj inducen una caída generalizada en la amplitud de las ondas alfa. (Mientras más oscuro sea el color azul, más dramática será la caída). Crédito: Connie X. Wang / Caltech.

Los seres humanos tenemos un sexto sentido que es sensible al campo magnético terrestre y similar al que poseen otras especies animales para orientar su navegación.

Lo han descubierto científicos del Instituto de Tecnología de California y la Universidad de Princeton en Estados Unidos, así como de la Universidad de Tokio en Japón: las ondas cerebrales humanas se alteran en función de las variaciones del campo magnético terrestre. 

Kirschvink y Shimojo, autores de esta investigación, señalan en un comunicado que esta es la primera evidencia científica de la existencia de un nuevo sentido human
eNeuro. o: la magnetorrecepción. Sus hallazgos se han publicado en la Revista eNeuro.  

Este equipo de investigadores introdujo a 34 voluntarios, de diferentes edades y procedencia étnica, en una habitación oscura y silenciosa equipada para simular en su interior el campo magnético de la Tierra y su dinámica. Los voluntarios, durante esta experiencia, estaban equipados con un casco de electroencefalografía que medía su actividad cerebral.

Los investigadores manipularon el campo magnético artificial para replicar sus variaciones naturales y descubrieron que los cerebros de los participantes reaccionaban a estos cambios modificando las ondas alfa, propias de un estado mental de calma ajeno al sueño.

Las ondas alfa en el cerebro tienen una frecuencia de entre 8 y 13 hercios y ofrecen una medida de si el cerebro está siendo activado o está en modo de reposo o "piloto automático". Cuando un cerebro humano no está conectado, el poder alfa es alto. Cuando algo llama su atención, consciente o inconscientemente, su poder alfa decae ante varios estímulos sensoriales como la visión o el oído.

Los diferentes experimentos a que fueron sometidos los voluntarios demostraron que, en algunos participantes, el poder alfa comenzó a disminuir desde los niveles de referencia inmediatamente después de la estimulación magnética, descendiendo hasta en un 60 por ciento durante varios cientos de milisegundos, y luego recuperó su frecuencia habitual unos segundos después del estímulo. "Esta es una respuesta clásica y bien estudiada de ondas cerebrales a una información sensorial, denominada desincronización relacionada con eventos, o alfa-ERD", explica Shimojo. 

Particularidad sorprendente 
Esta reacción cerebral mostró una particularidad sorprendente: las ondas cerebrales surgidas como consecuencia de las variaciones en el campo magnético artificial eran más sensibles a las que ocurren en el hemisferio norte e ignoraban las variaciones propias del hemisferio sur, así como las que seguían la dirección de las agujas del reloj. 

Según los investigadores, esta diferente reacción podría explicarse por el hecho de que todos los participantes en el experimento procedían del hemisferio norte: sus cerebros, por ello, reaccionan a las variaciones que les parecen naturales (propias de su ubicación geográfica) e ignoran las variaciones que consideran anómalas (las propias del hemisferio sur que nunca han experimentado).

Es como si apagaran esa brújula interna cuando están sometidos a campos magnéticos desconocidos. En el caso de la reacción a las variaciones magnéticas que siguen el sentido de las agujas del reloj, consideran los científicos que es posible que haya generado una reacción diferente que no ha sido registrada. En cualquier caso, dejan claro que serán precisas nuevas investigaciones para considerar completamente demostrado que realmente disponemos de un sexto sentido magnético.

¿Por qué no nosotros? 
"Muchos animales tienen magnetorrecepción, entonces ¿por qué no nosotros?" plantea Connie Wang, estudiante graduada de Caltech y autora principal del estudio. Por ejemplo, las abejas, los salmones, las tortugas, las aves, las ballenas y los murciélagos usan el campo geomagnético para orientarse, y los perros pueden ser entrenados para localizar imanes enterrados. 

Durante mucho tiempo se ha teorizado que los humanos pueden compartir una habilidad similar. Sin embargo, a pesar de una serie de investigaciones que intentaron probarlo en los años 80, nunca se ha demostrado de manera concluyente. 

"Aristóteles describió los cinco sentidos básicos como visión, oído, gusto, olfato y tacto", dice Kirschvink, coautor del estudio. "Sin embargo, no consideró la fuerza de la gravedad, la temperatura, el dolor, el equilibrio y varios otros estímulos internos que ahora sabemos son parte del sistema nervioso humano. Nuestra ascendencia animal sostiene que los sensores del campo geomagnético también deberían estar presentes, no representando al sexto sentido, sino tal vez al décimo u undécimo sentido humano todavía por descubrir", concluye.

Sistema de localización 
El campo magnético terrestre se origina en el núcleo y la corteza de la Tierra: surge de las corrientes procedentes del material fundido del núcleo y se nutre al mismo tiempo de los campos de las rocas magnetizadas de la corteza. La vida en nuestro planeta es posible gracias a este escudo invisible que nos protege de la radiación solar

El campo magnético que percibimos procede directamente del núcleo y provoca variaciones en la intensidad y dirección del campo, desde el ecuador hacia los polos magnéticos. Además, los ángulos de inclinación del campo magnético terrestre varían con la latitud. Unidos, ambos elementos permiten a los animales conocer su posición geográfica y orientar su navegación en una dirección determinada.
Fuente: Tendencias Científicas 25. marzo.2019


Referencia Transduction of the Geomagnetic Field as Evidenced from Alpha-band Activity in the Human Brain. Connie X. Wang et al. eNeuro 18 March 2019, ENEURO.0483-18.2019
DOI:https://doi.org/10.1523/ENEURO.0483-18.2019 

domingo, 24 de marzo de 2019

NOS ADENTRAMOS EN EL PÁNICO CLIMÄTICO


Cada día, noticias de diversas partes de la Tierra, informan el comportamiento del Clima terrestre, preocupación mundial que implica que clima tendrán que enfrentar nuestros descendientes.  Es el motivo de la compilación del trabajo efectuado por el Editor de Tendencias 21, Eduardo Martínez de la Fe en Tendencias 21 del 20.marzo.2019


La complejidad del presente nos trasciende a todos y nos anima a participar activamente en este momento apasionante

Nos hemos adentrado en el pánico climático: en cualquiera de los escenarios venideros la devastación para la vida en la Tierra será inevitable. Los jóvenes se suman a las movilizaciones para frenar el colapso, junto a otros colectivos que demandan diferentes equilibrios: generacional, de género y económico. La complejidad del presente nos trasciende a todos y las oportunidades de participar activamente en este momento apasionante se multiplican.

Hace ya más de un mes que el reputado David Wallace-Wells señaló en The New York Times que nos hemos adentrado en lo que llamó el pánico climático: el momento en el que la sensación de que perdemos la batalla para evitar la catástrofe global se instala en la cultura humana.

El colapso de la civilización como consecuencia del cambio climático ya está en el horizonte: lo más probable es que las emisiones contaminantes coloquen al planeta 1,5ºC por encima de la temperatura previa a la revolución industrial.
La escalada seguirá hasta los 2ºC dentro de dos décadas y tal vez hasta los 4ºC en 2100.
En cualquiera de estos escenarios la devastación para la vida en la Tierra sería inevitable, como relata Wallace-Wells en su nuevo libro.

Aunque no puede descartarse una reacción social importantesegún el IPCC de Naciones Unidas deberíamos reducir en un 45 por ciento las emisiones de CO2, respecto a los niveles de 2010, en los próximos 10 años, una exigencia inconcebible con el creciente aumento de emisiones que estamos experimentando.
El acuerdo de París, que pretendía contener el calentamiento global por debajo de los 2ºC, está superado por los acontecimientos: en febrero de este año, la anomalía de temperatura ha sido de +1,19ºC en relación al período 1880-1899, según informa NASA- GISS (Goddard Institute for Space Studies). 

El pánico, respuesta lógica
El pánico es la única respuesta lógica ante esta situación, plantea Wallace-Wells. Y la reacción social crece en la misma medida en que el planeta se recalienta: diferentes movimientos sociales recorren el mundo pidiendo a los políticos actuaciones responsables para evitar el colapso.

En un Reino Unido paralizado por el Brexit, el movimiento Extinction Rebellion, surgido de un llamamiento de cien científicos, 
ocupó el año pasado cinco puentes de Londres para pedir a los políticos que dijeran la verdad sobre el cambio climático. 

Las reacciones sociales no han dejado de crecer, desde el movimiento End Climate Silence de Estados Unidos, o The Climate Mobilization, surgido en California en 2014, que pretende una movilización mundial para proteger a la humanidad y al mundo natural de la catástrofe climática, hasta los FFF (Fridays for the future) que protagonizan jóvenes de numerosos países para preservar el planeta. La huelga estudiantil global del 15 de marzo ha sido hasta ahora la mayor manifestación de este movimiento. 

Financial Times ha 
profundizado un poco en este movimiento juvenil a través de su inspiradora, la adolescente sueca Greta Thunberg: intervino el pasado enero en el Foro de Davos y explicó a los dirigentes empresariales que lo que quería era que entraran en pánico. 

Su experiencia personal es elocuente: aquejada de una depresión a los 10 años porque el mundo estaba muy mal, perdió diez kilos de peso y eso afectó a su crecimiento. Entonces decidió comprometerse con la acción climática y esa decisión le cambió la vida. 

Puede que un proceso similar se esté planteando ahora a nivel social: tal vez el pánico sea la reacción que necesitamos para sobrevivir como especie y superar la incertidumbre climática que nos agobia a todos. 

El mensaje de Greta representa lo que plantea esta generación ante el cambio climático: estamos como estamos porque un reducido grupo de personas está conduciendo el planeta hacia el desastre. No merece la pena estudiar porque no tenemos futuro. Y nos señalan como responsables por no hacer nada efectivo para evitarlo. El 24 de mayo es la nueva cita para la movilización estudiantil, anuncia 
Youth For Climate.

Movilización general
Sin embargo, el clima no es el único factor movilizador: los mayores, las mujeres, los científicos, los chalecos amarillos, salen a las calles para poner de manifiesto la complejidad del momento humano.

La crisis climática es solo uno de los factores: la cuestión generacional, la igualdad de género, la ignorancia, la polarización social, completan los desafíos que plantea la ecuación energética (no sabemos cómo calentar o enfriar la casa sin quemarla), origen de la crisis climática.

El catedrático Eduardo Costas 
señaló en la mesa redonda que organizamos el mes pasado con el Comité Científico del Club Nuevo Mundo, que el principal problema que tenemos para afrontar la crisis global es la ignorancia: está detrás no solo del cambio climático, sino también de ciertas enfermedades emergentes, como la resistencia a los antibióticos. Una amenaza sanitaria también está en el horizonte.

Todo indica que estamos al final de una etapa de la historia humana, que debemos asumir enormes cambios para sobrevivir como especie, y que los cambios deberemos protagonizarlos sin el apoyo de los políticos, los empresarios y las instituciones tradicionales, ya sean religiosas o sociales, que nacieron de una época ya periclitada y no saben cómo gestionar la complejidad del presente, una realidad que nos trasciende a todos. 

Nuevos desafíos
Los enfoques han de ser disruptivos. Uno de ellos puede ser la propuesta de crear un partido político mundial, expresión organizativa global del poder de los ciudadanos globales, que promueve el profesor de la universidad de Helsinki, Heikki Patomäki. 

Puede que crear un nuevo partido a estas alturas de la crisis de la civilización resulte anticuado, pero Patomäki lo 
justifica en la web de otro de los movimientos sociales más activos, La Gran Transición, con estas palabras: “a medida que la humanidad está entusiasmada por los descubrimientos científicos de nuevos planetas con la posibilidad de vida extraterrestre, nos damos cuenta cada vez más del peligro que representa nuestra civilización tecnológica para el futuro de la vida en la Tierra. La curiosidad humana sobre nuestro lugar en el cosmos y la conciencia de las grandes opciones ético-políticas que tenemos ante nosotros, exigen una nueva fase de aprendizaje colectivo y promoción de prácticas e instituciones que se ajusten a nuestro desafío común”.

La cuestión es idear fórmulas e iniciativas para afrontar los retos, que es lo que estamos haciendo nosotros desde el Club Nuevo Mundo. Este espacio de diálogo entre ciencia y sociedad para buscar soluciones innovadoras a los problemas globales, como se define a sí mismo el Club, está implicado, entre otras iniciativas, en el diseño de nuevos modelos políticos en el marco del proyecto europeo The Future of Government 2030+, tal como informamos en otro artículo

¿No sientes tú también que tienes que hacer algo? Las opciones de un compromiso de nuevo cuño abundan en esta transición hacia lo desconocido. ¡Es apasionante!
Fuente: Tendencias 21 – Eduardo Martínez de la Fe Editor 20.marzo.2019


Si eres consciente de la gravedad del momento actual y quieres aportar ideas, experiencias o conocimientos a este proceso de cambio global, todavía hay plazas libres en las diferentes modalidades de participación en el Club Nuevo Mundo.
Si estás interesado, no dudes en consultar los requisitos necesarios para ser Miembro Directivo   o Socio EstratégicoSocio Ejecutivo   o Community Partner. Si alguna categoría se ajusta a tu perfil e inquietudes, no dudes en postularte. Estudiaremos tu candidatura con el mayor interés y rigor. 
Fuente:Tendencias 21 20.marzo.2019

sábado, 23 de marzo de 2019

2-NONELAL EL OLOR A ANCIANO


El olor a anciano empieza a gestarse en el cuerpo humano a partir de los 30 años.





Foto de ancianos – Crédito: Google imágenes

No es la colonia de lavanda o rosas o alguna combinación de aromas descatalogada de los libros de tendencias.
Está en la piel. Las personas mayores tienen un olor particular que, aunque se manifiesta más especialmente a partir de los 60 años, no les es exclusivo: todos los seres humanos empiezan a desarrollarlo de forma gradual a partir de los 30 años.
"Es real y se identifica como malo, pero no tiene nada que ver con el sudor u otros fluidos corporales ni tampoco con falta de higiene", explica el químico José María Antón, investigador durante años en biotecnología para el CSIC y presidente y fundador del grupo Prima-Derm: "Lo causa el 2-nonelal, una molécula que se genera en la piel al oxidarse de forma natural los ácidos grasos de la barrera lipídica".

"El 2-nonenal [puro] huele realmente mal. Tanto que cuando abrimos una cápsula con esa molécula en el laboratorio, todo apesta". Es fácil de reconocerEl equipo del laboratorio de la compañía japonesa Shiseido fue el primero en documentarlo allá por 2001.

En una sociedad como la nipona, donde la fragancia suele considerarse como una invasión del espacio común, abundan los estudios sobre el funcionamiento de la oxidación de los ácidos grasos y cómo mitigar el mal olor corporal. Aun así, los japoneses, muy respetuosos con sus mayores, denominan a esta esencia corporal kareishu, "el olor de los abuelos".

Que haya unas cuantas moléculas rancias diseminadas por toda la piel no es graveEl problema surge a partir de los 30-40 años cuando se convierten en legión. "Los cambios hormonales de la madurez traen como consecuencia un aumento en la producción de lípidos en la superficie de la piel. Paralelamente, se va reduciendo nuestra capacidad antioxidante natural", explica el experto. "El resultado es que aumenta exponencialmente esa peroxidación, se genera más 2-nonenal y el cuerpo huele cada vez peor. Es ese olor que se nota en los asilos, por muy limpios que estén"

La diferencia con el sudor es que los lípidos no son solubles en agua

Y no se va por más que exageremos con la higiene: "Los lípidos no son solubles en agua. De ahí que el mal olor relacionado con los ácidos grasos sea tan complicado de eliminar". En esto se diferencia del sudor, que no es sino un caldo acuoso de sustancias y bacterias con ganas de descomponerlas. Un poco de agua y jabón los eliminan sin problemas.

Como si de una película de ciencia ficción se tratara, para atajar el
2-nonenal hay que neutralizarlo y varios laboratorios trabajan en sus soluciones.
Prima-Derm acaba ha lanzado una fragancia corporal unisex, Inner, con activos como el Sirtalice y el Seadermium, "procedentes de sendos microorganismos localizados por el CSIC a 3.400 metros de profundidad cerca de Isla Reunión. Esas moléculas encapsulan a las otras moléculas que producen el mal olor. De esta manera lo desactivamos", aclara Antón. Y no es la única opción. La compañía japonesa Mirai Clinical se encomienda a las propiedades antioxidantes del extracto de caqui para fabricar jabones y desodorantes que planten cara al temido 2-nonenal.

La pérdida de nuestra capacidad olfativa nos impide notar el olor

Si nos preguntamos qué hace la naturaleza para advertirnos de que nuestro cuerpo o el de nuestros coetáneos empieza a exudar 2-nonenal, la respuesta es bastante desalentadora. A medida que envejecemos, vamos perdiendo capacidad olfativa. No percibimos el olor del vecino que nunca nos gustó, pero tampoco esas rosas recién cortadas del jardín.
En concreto, a partir de los 70 la pérdida es tan notable que casi somos tan inmunes al mal olor como los niños menores de 8 años, que no se inmutan al entrar en el baño del jardín de infancia ni se alteran con las ventosidades de sus amigos, pese a que aquello hieda como la antesala del averno.
Científicos galeses lo explican por la pérdida de fibras olfativas y la muerte de las neuronas encargadas de procesar las fragancias
Dos procesos del deterioro físico natural fruto del envejecimiento. No nos enfademos a partir de ahora si sus mayores no son conscientes de que se han excedido con la colonia o de que les acompaña un cierto kareishuel 62,5% de las personas mayores de 80 años padecen algún tipo de merma en sus capacidades para detectar los aromas
FUENTE: El País – Buena Vida – Salomé García 26.septiembre 2018



viernes, 22 de marzo de 2019

GRAN MANCHA SOLAR

Imágenes magnéticas y de luz blanca de la mancha solar AR2736 de Observatorio de Dinámica Solar de la NASA


Una gran mancha solar, denominada AR2736, arrojó el 21 de marzo una CME hacia la Tierra, la cual está creciendo y crepitando con las llamaradas solares de clase C.
Hace dos días, la mancha AR2736 no existía; ahora la región activa se extiende a través de más de 100.000 km del disco solar y contiene múltiples núcleos oscuros tan grande como la Tierra, por lo que es uno de las mayores manchas solares de los últimos años.

La región activa ( película) de rápido crecimiento, se extiende a lo largo de más de 100.000 km de la superficie solar y contiene múltiples núcleos oscuros más grandes que la Tierra. Además, tiene un campo magnético complicado que está crepitando con las llamaradas solares de clase C. 
La mancha solar se inserta en este mapa magnético del sol del Observatorio de Dinámica Solar de la NASA

Las manchas solares son islas de magnetismo que flotan en la superficie del Sol. La mayoría de las manchas solares, como la mayoría de los imanes, tienen dos polos + (N) y - (S). La mancha solar ARorio2736, sin embargo, tiene varios polos con áreas de + y - que se empujan entre sí. 
Es por esto que la mancha solar está crepitando con bengalas.
Las líneas de campo magnético de polaridad opuesta se entrecruzan y explotan, un proceso conocido como reconexión magnética.

En el gran esquema del clima espacial, las llamaradas solares de clase C no se consideran eventos importantes. Sin embargo, estas explosiones son notables ahora porque el Sol recientemente ha estado muy tranquilo.
El mínimo solar está en marcha;en contexto, los destellos C representan un aumento real en la actividad solar, que pueden ionizar la parte superior de la atmósfera de la Tierra, perturbar las comunicaciones de radio de onda corta e incluso lanzar CME hacia la Tierra. 
Fuente: Space Weather 22. marzo.2019

Condiciones del Sol a las 03:42 UTC del 22.mar.2019 
Velocidad del viento solar 314,4 Km/seg / 
Densidad4.2 protones/cm3

Leer más: Alertas de Aurora SMS , email .
Visita Spaceweather.com para ver una película de la mancha creciente y  averiguar lo que hace que sea tan explosiva.

Traduccion libre de Soca