sábado, 6 de febrero de 2010

RELOJ DE ION DE ALUMINIO


Imagen: Investigador postdoctoral James Chin-Chou Wen con el reloj más preciso del mundo, basada en las vibraciones de un ión de aluminio único (átomos con carga eléctrica). El ion es atrapado en el interior del cilindro de metal (centro derecha). Crédito: J. Burrus / NIST

En el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) los físicos han desarrollado una versión mejorada de un reloj atómico experimental basado en un solo átomo de aluminio que ahora es el reloj más preciso del mundo, basado en un átomo de mercurio.
El nuevo reloj de aluminio no ganaría ni perdería un segundo en alrededor de 3,7 millones de años, de acuerdo a las mediciones que se informó en el Physical Review Letters.
Este es "El reloj de lógica cuántica NIST" en su segunda versión; y se llama así porque toma el procesamiento lógico utilizado para almacenar datos en átomos de la computación cuántica experimental, otro aspecto importante del mismo grupo de investigación del NIST. La segunda versión del reloj de la lógica ofrece más de dos veces la precisión de los originales.

Además de demostrar que el aluminio es ahora un mejor cronometrador que el mercurio, los resultados más recientes confirman que los relojes ópticos están ampliando su ventaja en algunos aspectos-por el NIST-F1. La norma en los EE.UU. para medir el tiempo civil es el reloj de cesio, que actualmente mantiene la hora con una variación de 1 segundo en unos 100 millones de años.
Debido a que la definición internacional (en el Sistema Internacional de Unidades, o SI) se basa en el átomo de cesio, el cesio sigue siendo el "líder" para el cronometraje oficial.
El reloj de la lógica se basa en un ión de aluminio (átomos con carga eléctrica) atrapados por los campos eléctricos y vibran a frecuencias de luz ultravioleta, que son 100.000 veces superior a frecuencias de microondas utilizados en NIST-F1, y otras normas de tiempo similar en todo el mundo. Relojes ópticos por lo tanto, dividen el tiempo en unidades más pequeñas. Es posible que algún día pudiera llegar a los estándares de tiempo 100 veces más precisos que las normas de microondas de hoy. Su mayor frecuencia es uno de una serie de factores que permite mejorar la precisión y exactitud.

Fuente :NIST National Institute of Standars and Technologic