viernes, 7 de diciembre de 2012

VOYAGER 1 Y UNA NUEVA REGIÓN EN EL ESPACIO PROFUNDO


Esta imagen fija, corresponde a una de un conjunto de animaciones que muestra a la nave espacial VOYAGER 1 de la NASA, cuando inicia la exploración de la llamada “carretera magnética”, nueva región en nuestro Sistema Solar. En esta región, las líneas del campo magnético del Sol se conectan a las líneas del campo magnético interestelar, permitiendo que las partículas del interior de la heliosfera compriman la distancia de las partículas magnéticas procedentes del espacio interestelar. Crédito: NASA/JPL-Caltech

 La Nave Espacial VOYAGER 1 de la NASA ha entrado en una nueva región en los confines de nuestro Sistema Solar, que los científicos consideran pueda ser el área final que la nave espacial tenga que cruzar, antes de llegar al espacio interestelar.
Edward Stone, uno de los científicos del Proyecto Voyager en el Instituto de Tecnología de California / California Institute of Technology o Caltech en inglés, ubicado en Pasadena,  comenta: “A pesar que la sonda VOYAGER 1 se encuentra aún en el entorno solar, ahora podemos saborear como es el exterior de dicho entorno debido a que las partículas entran y salen de esta carretera magnética; creemos que esta es la última etapa en nuestro camino hacia el espacio interestelar. Nuestra mejor estimación es que se encuentra desde solo unos meses hasta un par de años de distancia. La nueva región no es lo que esperábamos, pero hemos llegado a esperar lo inesperado de Voyager".
Los científicos se refieren a esta región como una nueva autopista magnética para partículas cargadas, ya que las líneas magnéticas del campo de nuestra estrella, se conectan a las líneas del campo magnético interestelar. Esta conexión permite un menor consumo de energía de las partículas cargadas que se originan desde el interior de la heliosfera solar [la burbuja de partículas cargadas que sopla el Sol alrededor de sí mismo], disminuyendo el acercamiento y  permitiendo transmitir una mayor energía de las partículas del exterior antes de entrar en esta región; por cuanto, las partículas cargadas rebotan en todas direcciones como si quedaran atrapadas en carreteras locales dentro de la heliosfera. El equipo Voyager infiere que esta región todavía está dentro de nuestra burbuja solar porque la dirección de las líneas del campo magnético no han cambiado.
La dirección de estas líneas de campo magnético se prevé que cambiarán cuando el VOYAGER 1 rompa  la barrera final y entre al espacio interestelar
Los nuevos resultados fueron descriptos el 3 de diciembre de 2012 en la reunión de la Unión de Geofísica Estadounidense (American Geophysical Union, en idioma inglés), que tuvo lugar en San Francisco.

Animación de la nave espacial Voyager 1 - Crédito JPL-Caltech / NASA

Desde diciembre del año 2004, cuando la nave espacial VOYAGER 1 cruzó un punto en el espacio, llamado choque de termino, la nave ha estado explorando la capa externa de la heliosfera, llamada heliopausa; en esta región, las corrientes de partículas cargadas procedentes del Sol,  que conocemos como “viento solar”, bruscamente se desaceleraron a velocidades supersónicas llegando a ser turbulentas.
El entorno al VOYAGER 1 fue consistente durante aproximadamente 5 años y medio, luego, la nave detectó que la velocidad del viento solar  hacia el exterior se redujo a cero, y que también la intensidad del campo magnético había comenzado aumentar en ese momento.  
Mediante dos instrumentos a bordo del VOYAGER 1 se obtuvieron datos que la medición de las partículas cargadas, mostraban que la primera nave espacial hecha por los seres humanos, había entrado en esta región que hoy llamamos “carretera magnética”, el 28 de julio de2012.
Luego el VOYAGER 1 escapó y volvió a la región en varias ocasiones, ingresando de nuevo el 25 de agosto de 2012 manteniéndose desde entonces, estable en este medio. 
“Si tuviéramos que juzgar por los datos solamente de partículas cargadas, yo habría pensado que estaba fuera de la heliosfera” dice Stamatios Krimigis, investigador principal del instrumento de carga de partículas  de bajas energías, con sede en la Johns Hopkins Applied Physics Laboratory, Laurel, MD. “Pero tenemos que mirar lo que todos los instrumentos nos dicen, y solo el tiempo dirá si nuestras interpretaciones acerca de esta frontera son correctas”.

Los antecedentes obtenidos por la nave, revelaron que el campo magnético se hacía más fuerte cada vez que el VOYAGER 1 entraba  en la región de la “carretera magnética”, sin embargo, la dirección  de las líneas del campo magnético, no cambió.
“Estamos en una región magnética diferente a cualquiera que haya estado antes, alrededor de 10 veces más intensa que antes del final del choque, pero los datos del campo magnético no muestran ninguna indicación de que estamos en el espacio interestelar”  dijo Leonard Burlaga, un miembro del equipo del magnetómetro del Voyager, con sede en el Centro Goddard de Vuelo Espacial en Greenbelt, MD., “Los datos del campo magnético resultó ser la clave para identificar cuando cruzó el impacto de término, y esperamos que estos antecedentes nos dirán cuando, por primera vez, se alcanzará el espacio interestelar”.
Las naves espaciales VOYAGER 1 Y VOYAGER 2  fueron lanzadas con 16 días de separación en el año 1977. 
VOYAGER 1 es el objeto fabricado por los seres humanos que ha viajado más lejano por el espacio; a esta fecha, se encuentra a 18.453.400.000 (un poco más de 18 mil millones) de kilómetros [122,68 UA del Sol]; su señal demora  17 horas en llegar a la Tierra.
En cuanto a VOYAGER 2  se encuentra a un poco más de  15.000 mil millones de kilómetros. Los cambios en esta nave son más graduales y los científicos consideran que aún no entra en la “carretera magnética”.
Fuente: JPL - VOYAGER The Interstellar  Mission / NASA comunicado de prensa  2012-381 del  03.dic.2012
Enlace a Misión: http://voyager.jpl.nasa.gov/