viernes, 16 de julio de 2010

BREVE RESEÑA DE LAS CONSTELACIONES


Constelación de Orión - Vista desde hemisferio norte - para verla desde el sur hay que girarla

Esta entrada la escribo a sugerencia de un una persona con inquietudes astrofísicas que en días pasados, planteó la poca información que había relacionada con las constelaciones y su historia. Aquí va una breve reseña para quienes se interesan en el tema.

Historia

Las constelaciones son formas imaginarias que distinguimos en el cielo nocturno, uniendo mentalmente, los puntos formados por grupos de estrellas visualmente cercanas entre sí. A lo largo de una vida humana, la posición de las estrellas no varía apreciablemente, por lo tanto, al mirar siempre una constelación, la veremos igual y acabaremos familiarizándonos con su formas. Estas configuraciones estelares asociadas a diversos objetos o personajes, solo se aprecian si las vemos desde la Tierra; un eventual viajero estelar que observe las estrellas desde el espacio, verá otras figuras según sea su imaginación.
La falta de registros históricos dificulta conocer el momento preciso en el cual se originaron las constelaciones. En la cultura Mesopotámica, unos 4.000 años a.C. registran ya a Leo (el León), Taurus (el Toro) y Scorpius (el Escorpión) aún cuando no se utilizaban propiamente esos nombres, posteriormente el estudio del cielo se fue profundizando con los antiguos babilonios. Se cree que el interés de estos pueblos por la disposición de las estrellas tuvo motivos fundamentalmente prácticos, usualmente con propósitos agrícolas, de viaje y religiosos: como ayuda para medir el tiempo y las estaciones y para servir de orientación a navegantes y mercaderes cuando realizaban travesías durante la noche, ya fuese por mar o por el desierto. Así, imaginando figuras con las cuales relacionaron los grupos de estrellas creando leyendas e historias de lo que representaban les sería más fácil y seguro recordar las rutas a seguir.
Los Griegos reconocieron y nombraron cuarenta y ocho constelaciones. Muchas de estas constelaciones también fueron reconocidas por los árabes, los egipcios, y babilónicos.

En 1928, la Unión Astronómica Internacional (UAI) fijó los límites de las 88 constelaciones del firmamento; trece de las cuales, corresponden a la eclíptica y que se conocen como las del zodiaco. Son trece porque parte de la constelación de Ophiuchus se halla en la eclíptica, haciendo un total de 13 constelaciones en vez de las 12 popularmente conocidas (existe la discusión que si Cetus forma parte del zodíaco, debido que toca ligeramente la eclíptica, en este caso, serían 14 constelaciones que la comprenderían).

Los nombres de las constelaciones se dan en latín, porque el latín era el idioma fundamental en la época en que se formalizaron los nombres. Los nombres usados por los Griegos, los egipcios, y otras personas fueron traducidos a latín. Por la conveniencia, las civilizaciones antiguas nombraron las constelaciones con ciertas figuras que tenían una cierta similitud con los animales, hombres o mujeres legendarios o mitológicos.

De las 88 constelaciones adoptadas por la UAI, casi la mitad provienen de la imaginación de los astrónomos griegos. Homero menciona a Orión en la Odisea (obra que data del siglo IX a. C.). Mil años antes, en el Antiguo Egipto, era conocida como Sahu. El Zodíaco, dividido en doce constelaciones (no consideraron Ophiuchus) surgió en Babilonia durante el reinado de Nabucodonosor II siglo VI a. C., vinculado a las doce lunaciones anuales. Lo adoptará la cultura griega, dándole a las constelaciones los actuales nombres.

La compilación exhaustiva de constelaciones más antigua conocida se remonta a Claudio Ptolomeo, quien en el siglo II a. C. presentó un catálogo de 1022 estrellas, agrupadas en 48 constelaciones, en su obra Almagesto; la obra fue escrita en griego, con el título Ἡ μεγάλη Σύνταξις (He Megále Síntaxis: ‘el gran tratado’). Dicho trabajo, que será la base de muchos resúmenes astronómicos occidentales posteriores, hasta finales de la Edad Media, sólo incluía las estrellas visibles desde Alejandría, lugar desde donde Ptolomeo llevó a cabo sus observaciones.

Los Chinos agruparon las constelaciones en forma diferente de las modernas constelaciones reconocidas por la UAI (que se basan en la astronomía griega); esto se debe principalmente a que el desarrollo de la astronomía china fue independiente, aunque paralelo a la griega.

Las constelaciones de la astronomía hindú se denominan nakshatra o mansión lunar, que corresponden a cada una de las 27 divisiones del cielo, identificadas por las estrellas más destacadas dentro de las mismas, por las cuales pasa la Luna durante su ciclo mensual. Por lo tanto, cada uno de ellos representa una división de la eclíptica similar a la del zodíaco occidental (13° 20' en lugar de los 30° para cada signo del zodiaco). El periodo orbital de la Luna es de 27.3 días, por lo que la Luna tarda aproximadamente un día para pasar a través de cada nakshatra.

Los astrónomos Incas identificaron diversas áreas oscuras de la Vía Láctea como animales, y los asociaron con la temporada de lluvias; debido a esto se les conoce como «constelaciones oscuras». Estas áreas son las que comúnmente se denominan nebulosas oscuras. En Cuzco donde muchos investigadores han encontrado documentos de colonizadores españoles que describen el Templo del Sol, del cual irradiaban cuarenta y un ejes llamados ceques, cuya disposición implicaba lineamientos geománticos o astronómicos, que definían el valle en 328 huacas las cuales cumplían funciones rituales y políticas. Los Incas conocían la revolución sinódica de los planetas, e igualmente construyeron un calendario lunar para las fiestas religiosas y uno solar para la agricultura. Los Chibchas conocían la constelación de Orión y reconocían la relación entre la salida heliacal de Sirio con el comienzo de la temporada de lluvia

Zodiaco: En Astronomía, el zodíaco o zodiaco (del griego "zoon-diakos" que significa rueda de los animales) es una banda que circunda la esfera celeste comprendiendo a la eclíptica y que es suficientemente ancha para contener al Sol. Comprende 13-14 constelaciones, La decimotercera es Ofiuco, en donde el disco solar se encuentra de finales de noviembre a mediados de diciembre; y la decimo cuarta, como se ha indicado más arriba, sería la constelación de Cetus, quel toca ligeramente la banda del zodíaco, su inclusión se halla en discusión.

Las 88 constelaciones definidas por la UAI son (en orden alfabético): Andrómeda, Antlia, Apus, Aquarius, Aquila, Ara, Aries, Auriga, Bootes, Caelum, Camelopardalis, Cáncer, Canes Vrnatici, Canis Major, Canes Minor, Capricornus, Carina, Cassiopea, Centaurus, Cepheus, Cetus, Chamaeleon, Cicinus, Clumba, Coma Berenice, Corona Auystralis, Corona Borealis, Corvus, Crater, Crux, Cygnus, Delphinus, Doradfo, Draco, Equuleus, Eridanus, Fornax, Gemini, Grus, Hercules, Horologium, Hydra, Hydrus, Indus, Lacerta, Leo, Leo Minor, Lepus, Libra, Lupus, Lynx, Lyra, Mensa, Microscopium, Monoceros, Musca, Norma, Octans, Ophiuchus, Orion, Pavo, Pegasus, Perseus, Phoenix, Pictor, Pisces, Piscis Austrinus, Puppis, Pyxis, Reticulum, Sagitta, Sagittarius, Scorpios, Sculptor, Scutum, Serpens, Sextans, Taurus, Telescopium, Triangulum, Triangulum Astrale, Tucana, Ursa Major, Ursa Minor, Vela, Virgo, Volans y Vulpecula.

Bibliografía: Observando el Cielo de David H. Levy / Atlas del Cielo del Dr. Fernando Martín Asin / Wikipedia la Enciclopedia Libre / Astronomía Contemporánea del Dr. José Maza Sancho / Guía del Astrónomo Amateur de Colin Humphrey
www.mallorcaweb.net/masm/descon
.htm

EN PROBLEMA INTERNACIONAL SE TRANSFORMA CLIMA ESPACIAL



Hoy, 16 de julio de 2010, NASA ha informado a través de su página Science News, de un gran problema, que un sólo país está imposibilitado a enfrentar, y se necesita que las naciones tecnológica mente más avanzadas puedan en conjunto buscar eventuales soluciones en el mediano y corto plazo.

Ése es el mensaje de los científicos de más de 25 naciones con tecnología avanzada, reunidos en el salón La Vida Internacional (ILWS sus siglas en inglés) celebrada en Bremen Alemania han tratado el problema de las tormentas solares, como predecirlas y mantenerse a salvo de sus efectos; en especial que apróximadamente en 2013, el Sol tendrá su próximo máximo solar.

En los últimos años se ha tomado una verdadera conciencia, que los 150 millones de kilómetros que nos separan del Sol, no significa que estemos muy lejos de él, todo lo contrario, las naves espaciales y los observatorios han mostrado que la Tierra se encuentra en la atmósfera exterior del Sol, afectado por vientos solares.
Ante la importancia del tema, hace algún tiempo los científicos acuñaron el término "Heliofísica" para describir la ciencia que estudia la relación Tierra-Sol; y NASA creó una división dedicada a la Heliofísica. Las Naciones Unidas con el propósito de estimular el interés e importancia del tema, declaró el año 2007 como el Año Heliofísico Internacional (AHI)
Predecir la actividad solar es un problema complicado, similar en algunos aspectos a las previsiones meteorológicas terrestres pero multiplicadas por la espinosa física del plasma solar y el magnetismo. Predecir la actividad del Sol es sólo la mitad del problema, la otra mitad es la Tierra. Cómo el campo magnético de nuestro planeta y su atmósfera podrán responder a cualquier tormenta solar, es un enigma magnetohidrodinámico que desafía a los mejores científicos para comprenderla, aún cuando tengan el apoyo de los superordenadores más potentes de la Tierra. Por estas razones, a menudo se dice que pronóstico del tiempo espacial se queda 50 años detrás de su contraparte terrestre.
La tecnología es maravillosa por los beneficios que aporta al ser humano, pero también permite visualizar que somos seres bastante frágiles cuando debemos enfrentar a la naturaleza.
Bibliografía: NASA Science News - Crédito de la Imagen: Ciencia NASA
Enlaces:
International Living with a Star program -- ILWS home page
Magnetic Portals Connect Sun and Earth --- (Science@NASA)
Severe Space Weather, Social and Economic Consequences -- (Science@NASA)
http://science.nasa.gov/science-news/science-at-nasa/2010/16jul_ilws/